Clases de cocina en la Esma

Empezaban a La mujer sin cabeza en el Tita, cuando Ada comenta como al pasar: Hebe de Bonafini esta dando clases de cocina en la Esma. Despues de la peli mas oscura, mas ardua y delicada de Martel, que ademas viene increible para mi tesis de duelo colectivo (y hasta promete devenir en capitulin), senti que era casi imperioso ir a ver eso. Estar en BA solo por un mes da algunas ventajas: Madre acepta faltar a su funcion en el cine club nucleo y a cruzar en auto la ciudad de punta a punta. Encontramos a Hebe sentada detras de un escritorio con una escenografia de ollas, flores algo marchitas e ingredientes, sin pañuelo y vistiendo un coqueto delantal blanco inscripto con slogan ¨cocina y politica¨ poco más arriba de una foto de Doña Pepa, su mama, la que la enseño a cocinar. "En el mismo lugar donde se eseño a torturar y a matar, contra los que quieren convertir este espacio en museo, nosotros enseñamos vida. Venir a la Esma a aprender a cocinar", arranca para su publico de fans con maneras más que televisivas. Y con un fondo de pizarron que tiene ¨trigo burgol¨ como toda formula se despliega el biodrama mas tenso, contradictorio, vertiginoso y absolutamente desquiciado de la ficción politica argentina. Como en toda la serie biografica de Vivi Tellas y sin dirección aparente, el encuentro cierra con un ceremonial de vino y degustación de bocaditos de trigo militantes.
gracias Ada!